Con la incorporación de un nuevo angiógrafo con tecnología de punta, único en el sector público, y la construcción de nuevas instalaciones, el hospital provincial San Juan de Dios de La Plata puso en marcha su servicio de Hemodinamia completamente renovado. El nuevo equipo permite obtener imágenes de alta definición, útiles para diagnosticar y tratar patologías cardiovasculares, afecciones que constituyen la primera causa de muerte en mayores de 40 años.

De esta manera, el San Juan de Dios se convirtió en el único hospital público provincial que cuenta con dos salas de intervencionismo cardiovascular. Para la atención de urgencias, este servicio cuenta además con una guardia que atiende las 24 horas todos los días del año. En promedio, atienden a unos 90 pacientes por mes, pero ahora, con la renovación esperan llegar a un centenar de pacientes mensuales para fin de año.

Para entender con mayor claridad de qué se ocupan, los médicos comienzan por explicar que el corazón es el órgano que, a manera de bomba, envía sangre a todo el organismo. La hemodinamia, entonces, es la rama de la cardiología que se especializa en el estudio del movimiento de la sangre dentro de las venas y arterias que recorren e irrigan los órganos de todo el cuerpo.

Antes, explican los especialistas, las angiografías solo servían para proporcionar imágenes de lo que pasaba dentro de los vasos sanguíneos. De este modo, se podían detectar aneurismas, obstrucciones y otras afecciones para luego operar. Los avances médicos y tecnológicos permitieron convertir la hemodinamia en “intervencionismo cardiovascular”, una especialidad que no solo sirve para evaluar las venas y arterias y diagnosticar enfermedades, sino también, para tratar y curar patologías con la colocación de stent liberadores de medicación, válvulas y endoprótesis.

“El angiógrafo nuevo, de última generación, ofrece alta definición de imágenes e incorpora aplicaciones para optimizar los procedimientos terapéuticos, lo que nos permite realizar intervenciones cada vez más complejas en el árbol coronario”, precisó Ignacio Rifourcat, jefe del servicio de Hemodinamia del San Juan. Agregó que ahora pueden “abordar de un modo menos invasivo enfermedades cardiovasculares que antes requerían una cirugía cardiaca convencional”.

El especialista contó que, en el San Juan de Dios, el 90 por ciento de los casos que se atiende afecta a las coronarias, las arterias que alimentan de sangre y oxígeno al músculo cardiaco. Pero también, pueden tratar vasculopatías periféricas de los miembros inferiores y problemas en los vasos sanguíneos que alimentan riñones y cerebro, entre otras afecciones.

LA RENOVACIÓN

La incorporación del nuevo angiógrafo convierte al hospital San Juan de Dios en el único de la provincia en contar con dos equipos de este tipo. La renovación del servicio de Hemodinamia consistió, además, en la construcción de una nueva sala, un nuevo sector de lavado pre-procedimiento para los profesionales, la remodelación de la sala de comandos y la creación de un nuevo espacio de recuperación para los pacientes intervenidos.

Allí trabajan nueve cardioangiólogos intervencionistas y un equipo de enfermería diseñado por la dirección del hospital para cubrir las urgencias las 24 horas todos los días del año.