El ministro de Economía y candidato presidencial de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa, advirtió hoy que el peronismo es la única fuerza capaz de hacer «lo que falta» en el país, al mostrarse con el presidente Alberto Fernández en una jornada en la que también anunció medidas de alivio para trabajadores informales y estrechó vínculos con aliados patagónicos como el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck; y de Neuquén, Omar Gutiérrez.
«Les guste o no, esta obra la empezó un Gobierno peronista, lo terminó otro Gobierno peronista, y las cloacas y el agua que faltan también las va a hacer un Gobierno peronista», dijo Massa al participar del acto de inauguración de una planta de tratamientos de residuos cloacales en la localidad bonaerense de Dock Sud, donde volvió a mostrarse con el Presidente, quien pidió «acompañar» al candidato y dijo que «sueña» con entregarle la banda el 10 de diciembre.
Fernández y Massa compartieron escenario por primera vez desde las PASO de agosto para inaugurar una obra que evitará, por primera vez en la historia, la contaminación por líquidos cloacales de la cuenca del Riachuelo, lo que garantizará la depuración de sus efluentes.
El Presidente dedicó gran parte de su discurso a elogiar al ministro y candidato, al recordar que «lo vio llegar en un momento difícil a hacerse cargo de la economía» del país.
«Es, de su generación, el que más se preparó para ser presidente. Es un hombre con quien compartimos los mismos valores y compromisos: estar al lado de los que menos tienen, sacar de la pobreza a los que han caído ahí y hacerlo con responsabilidad», destacó.
Y pidió al electorado que «si quieren que la Argentina siga por la senda del desarrollo, sabiendo que tenemos que resolver problemas, no se dejen confundir. Los que gritan ‘libertad carajo’ son los que quieren libertad para los ricos y más pobreza para los argentinos», apuntó Fernández en referencia a los libertarios del candidato Javier Milei.
Massa, por su parte, pidió a «cada trabajador» que «defienda sus derechos» porque, dijo, «con la obra pública le cambiamos la vida a la gente y multiplicamos el trabajo».
Esa misma línea había expresado el lunes el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, quien viene motorizando asambleas en esa cartera para hablar con los trabajadores del área.
Ante las condiciones climáticas durante el momento del acto, y en referencia a la oposición, Massa aseguró que «no lo va a correr ninguna lluvia, ni la motosierra ni la tijera de ninguna mujer», en ese último caso en alusión a las propuestas de la candidata de Juntos por el Cambio (JxC), Patricia Bullrich.
En su embate contra esa coalición opositora, el postulante afirmó que «algunos se inmolaron en el altar del ajuste a la obra pública, pero nosotros elegimos invertir porque defendemos el desarrollo y el crecimiento».
«Vivimos en un país en que se empieza a decir que el cambio climático es una mentira, que no importa si alguien contamina los ríos. Ellos son negacionistas del impacto climático porque les importa poco que la gente tome agua potable y que tenga un buen sistema de residuos cloacales. No les importan los ríos, ni el ambiente ni la salud de la gente», remarcó Massa.
Posteriormente, el ministro anunció, junto a la directora ejecutiva de Anses, Fernanda Raverta, el pago de dos bonos de $47.000, uno en octubre y otro en noviembre, para trabajadores informales de entre 18 y 64 años que no cuentan con ingresos registrados ni perciben asistencia económica del Estado como la Asignación Universal por Hijo (AUH), las becas Progresar o el Potenciar Trabajo.
Se trata de un sector de la población que no había sido alcanzado por las medidas económicas dispuestas en las últimas semanas para atenuar el impacto de la devaluación impuesta por el FMI.
El final de la jornada encontró a Massa de recorrida por Neuquén, donde visitó la obra del oleoducto norte del yacimiento de Vaca Muerta junto al gobernador Gutiérrez y Weretilneck, el mandatario electo de Río Negro, quien ya gobernó dos veces la provincia y recientemente explicitó su apoyo al candidato oficialista para las elecciones presidenciales del 23 de octubre.
La intención de Massa de acercarse a sectores no peronistas responde a su objetivo de convocar a un Gobierno de «unidad nacional» en caso de llegar a la Casa Rosada el 10 de diciembre: en la misma línea se inscribe el acto que compartió el fin de semana último con gobernadores radicales y justicialistas del Norte Grande.